jueves, 25 de abril de 2013
Reseña Solo para fumadores
Empezó fumando su primer cigarrillo a los 14 o 15
años, siendo esa vez la peor, sintiéndose muy mal por lo que había hecho,
incluso con ganas de vomitar. Pero después en la universidad ya era algo
normal no podía entrar al patio de letras sin un cigarrillo encendido Se
preguntaba si la adicción al tabaco era hereditaria, su papa era un fumador
moderado que lo dejo cuando se dio cuenta que le hacía daño, en cambio los tíos
si eran grandes fumadores. Tiempo después ingresó a la facultad de derecho algo
muy bueno ya que podía pagarse su vicio. Todo cambio le tocaba irse a Europa n
barco, un sueño para cualquier tabaquista no sólo porque podía comprarle a
marineros contrabandistas o en puertos libres sino porque nuevos escenarios
pusieron al vicio de fumar en un marco privilegiado. Lo disfruto hasta que
llego a España donde ya casi no le quedaba plata, no tenis plata pero si tenía
su problema de adicción por lo que necesitaba seguir comprando cigarrillos, así
que pidió uno fiado algo que jamás había hecho. Él se preguntaba por qué los
escritores no hablaban del cigarrillo en sus obras si muchos de ellos habían
sido grandes fumadores exceptuando a Thomas Mann quien dijo "no comprendo cómo
se puede vivir sin fumar, cuando me despierto me alegra saber que podré
fumar durante el día y cuando como tengo el mismo presentimiento. Si, puedo
decir que como para fumar... Un día sin tabaco sería el colmo del aburrimiento
sería para mí un día absolutamente vacío e insípido y si por la mañana tuviese
que decirme hoy no puedo fumar creo que no tendría el valor para
levantarme". Vendió muchas
cosas con el fin de comprarse sus cigarrillos, incluso vendió sus 10 ejemplares
del libro los gallinazos sin plumas pero también se le fueron acabando las
cosas para vender por lo cual le tocaba ir desesperadamente por el barrio
latino pidiendo cigarrillos, en pleno verano, cruel verano. Camino París ya
todos sus amigos a e habían ido sólo estaba el, caminando por las calles
mirando al piso a ver si lograba encontrar monedas, billetes o colillas peor
todas las colillas que veía estaban mojadas y pisadas hasta que vio salir a un
caballero elegante del máxims con un cigarrillo encendido en la mano fue tanto
el desespero que le pidió un cigarrillo el caballero horrorizado se fue, y ahí
se prometió nunca más volver a mendigar un cigarrillo pues era muy bajo lo que
había hecho. Se convirtió en repartidor de periódicos uno de los trabajos más
difíciles que le había tocado hacer pero este trabajo no duró mucho, aunque ya
se había prometido que nunca más mendigaría un cigarrillo por lo cual busco
cualquier trabajo. Un día llego a la casa de Carlos en la cama había un pequeño
bulto por lo que le quito las cobijas pero no se encontró con lo que esperaba
encontrarse había una enano desnudo, pero él le explico que era amigo de Carlos
y el enano era alguien que se estaba quedando en su casa solo por una noche
desde ahí
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